viernes, 15 de mayo de 2015

Resumen de mi primer 101



Como diría alguno que yo me sé,” te ha tocado hacer el resumen por bocazas”  jejejeje

No podía ser menos, puesto que he sido yo el “culpable” de este embrollo.

Ya hace algún tiempo que vengo detrás de mis compis machacando con el 101, que si vamos a hacerla este año, que tengo muchas ganas de hacerla, que ya toca……. La cuestión es que los convencí. Siempre me ha llamado la atención esta gran prueba de esfuerzo y sufrimiento, pero, unos años la romería, otros años trabajo y siempre he tenido alguna excusa para no realizarla y digo una excusa porque en realidad me daba mucho respeto y no me sentía capaz de participar.

Y dicho y hecho, 2015 ha sido el año que le he echado valor.

Un par de días antes de la prueba, nuestro compañero José Luis, nos comenta que no ha querido decirnos nada antes, pero que está con un lumbago de dos pares, que está con tratamiento, pero que lo ve negro poder participar. Le damos todos los ánimos posibles, pero no pinta bien. El viernes por la noche nos dice que lo va a intentar pero a ver como se levanta. Quedamos a las 8 en irnos para Ronda, para poder aparcar sin problemas. Cuál es mi sorpresa que José Luis dice que se encuentra bien, dentro de lo que cabe y que va a participar si puede hasta el final.

Aparcamos el coche y nos vamos calentando piernas hasta el campo de fútbol donde está la salida. Ya los nervios, no sé si de novato en estas lides, van apoderándose del cuerpo, aunque lo nuestro no sea competir, si no pasar el día lo mejor posible y acabar la prueba. Se nota el ambiente en las calles, nos vamos acercando al punto de partida y cada vez nos vamos juntando más ciclistas. Una vez dentro, te das cuenta de que se es un privilegiado el tener plaza y estar entre tantos deportistas juntos. Nos encontramos con los compañeros del club de San Pedro 29seis70, y nos quedamos con ellos para afrontar la salida, después de hacernos alguna foto.


Casi sin darnos cuenta llega la hora del “chupinazo” y comenzamos a afrontar el 101. Casi 10 minutos después, salimos del campo de fútbol.

¡¡¡Que ambientazo, que de ciclistas y que de gente animando!!!

Parecen que se pasan en segundos llegar a la Planilla, punto donde comienza en realidad la prueba.

La inercia en los primeros kilómetros  hace que vayamos mas “rápido” de lo hablado, pero entre tanta multitud es prácticamente imposible ir a otro ritmo.

Juntos de principio a fin, esa era nuestra norma, por así decirlo. Nada de competir y nada de llegar unos antes que otros, solo a intentar disfrutar.

Recinto ferial, carril de coca, navetas, circuito de velocidad, arriate y llegamos a las salinas. Territorio más que conocido por todos los de la zona, pero irreconocible con la 101. Unos que se bajan, otros que se caen, otros que no se apartan, otros que intentan meterse por huecos físicamente imposibles…….. y así intentar llegar hasta arriba.

Paramos en el primer avituallamiento del Polear para refrescarnos un poco y continuamos hacia Alcalá del Valle, subimos el conocido tajo Melchor, aquí sin problemas puesto que la gente se aparta y pudimos subirlo montados.
Nos volvemos a juntar para entrar en Setenil. Una vez llegados a este punto, las sensaciones son indescriptibles. La entrada en las Cuevas del Sol te pone la piel de gallina, aunque antes de llegar ahí, nuestro compañero Juan se llevo una gran sorpresa….


Salimos de Setenil con las pilas cargadas después del apoyo de amigos y familiares, desde aquí comienza en realidad los 101 km.
Afrontamos la subida a los montecillos y la subida del Charco a paso tranquilo, más que nada en este último punto, por ser imposible por la cantidad de ciclistas que van bajados de sus bicis, aunque a duras penas conseguimos llegar al final de la subida sin poner pie a tierra. Bajamos el bigote de la zorra y sin darnos cuenta estamos en el cuartel de la  Indiana, paramos a reponer fuerzas con ese caldito de pollo que sienta tan bien, aunque algunos no tanto…..
Continuamos en dirección a la Ermita, aquí sí que hay que echar pie a tierra y subir empujando “las burras”. Durante todo el día hizo calor, pero en esta subida y en el sendero de la Muela, es donde a mi parecer más se notó. 

Bajamos hacia Benaoján y pasamos por la estación, llegando al citado sendero. Subida la Muela, dirigimos nuestra mirada hacia Ronda, ¡ya está ahí!, la cuesta del cachondeo se sube aunque sea arrastrándonos.

Hacia la mitad de la cuesta, decidimos bajarnos, ya que hemos llegado hasta aquí sin problemas, no nos complicamos. Aunque uno de nosotros está muy fuerte
No es tan fiero el león, como lo pintan.
Ya en el barrio nos volvemos a juntar y nos dirigimos hacia la Alameda en medio del gentío, entre ánimos y aplausos del personal, la verdad que llegas en volandas, parece que no llevaras en las piernas los casi 114 km que salieron en el cuentakilómetros.

Ante todo dar las gracias a los compañeros por hacer esta carrera juntos, a mi mujer que ya con casi 8 meses y medio me estuvo dando ánimos en Setenil y sobre todo en Ronda en la meta y a José Dominguez, sin ti hubiese sido imposible este año. Dar la enhorabuena a todos los que consiguieron llegar, al club Artanaca porque cada año se superan. . Y para terminar, dar ánimos a los que se quedaron en el camino, el año que viene con más fuerza.